Un inciso. Llegar a casa, poner la tele y encontrarte al Señor de los Pasos dando la curva de entrada a la alameda. Cosas que la vida te regala.
Ahora también digo, el capataz nefasto. En un solo de trompeta y solo se le escuchaba a el dar voces y arengando..."vamos que podemos con esto","suene lo que suene a nuestro pasito"... En fin.