La Esperanza va a destinar lo recaudado en las cuotas de salida (restando la parte de flores, velas, etc, que se va a pagar igualmente), a su bolsa de caridad.
Aun así, quien quiera recuperar el importe de dicha cuota, podrá reclamarlo y se le devolverá, y quien aún no hubiera pagado pero quiera aportar voluntariamente, podrá si quiere, ingresar el donativo para destinarlo a la obra social mencionada.
Así es como creo que se debe gestionar esta situación, cumpliendo a pesar de todo con los compromisos para que esas empresas no pierdan dinero ni sus empleados su puesto de trabajo, informando al hermano y dándole a éste la opción de decidir si quiere recuperar su dinero o, por el contrario, donarlo.
Ya lo ha hecho alguna hermandad más, y pienso que es digno de elogiar esa actitud responsable y solidaria.
Lástima que la mayoría de las hermandades y la propia Agrupación, no hayan tomado ejemplo de momento (no sé a qué están esperando).....