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Debates / POSIBLES SOLUCIONES A LAS SILLAS VACÍAS
« en: Mayo 10, 2017, 05:25:25 pm »
Abro este post para iniciar un debate, sobre la problemática (estética, no económica, ya que las sillas se pagan con anterioridad a la Semana Santa) de la gran cantidad de sillas y tribunas que se muestran prácticamente vacías al paso de algunas cofradías. Sobre todo las que abren y cierran las jornadas.
¿Horarios?, ¿Tiempos de paso?, ¿Precio de los abonos?, ¿Perpetuidad?, etc... que cada uno defienda su postura, a ser posible con argumentos.
Por mi parte, considero que el coste medio de los abonos es bajo. Un espectáculo del Circo del Sol (por poner un ejemplo que acabo de consultar) dura unas 2 horas y el precio medio por asiento está en 50-60€. La Semana Santa de Málaga ofrece una experiencia (artística y musical) de 6 horas diarias durante 6 días y el precio medio está en torno a los 70€ por localidad.
Quizás de esta manera, al abonado que realiza el pago, le "dolería" más quedarse en su casa y no disfrutar del "espectáculo". Aun así, esto tiene muchos matices, ya que para algunas personas 70€ es un dineral y para otras no tanto.
En contrapartida el Recorrido Oficial debería ofrecer la suficiente comodidad y servicios equivalentes al coste. No es normal que en los tiempos que corren la gente tenga que soportar 6 horas sentadas en una silla incómoda y con estrecheces en las 4 direcciones, con dificultades en los accesos y sin un mínimo de información sobre lo que va a presenciar (historia, titulares, horarios, bandas, etc.), entre otros aspectos mejorables.
Esta incomodidad también lo considero fundamental a la hora de decidirse a ocupar el asiento de primera a última hora.
Como siempre es bueno comparar otras realidades, en el resto de las capitales de provincia andaluzas el precio es inferior, excepto en Sevilla, donde a pesar de contar con 12.000 asientos más que en Málaga, y el precio medio ser un 70% superior, han tenido este 2017 una demanda de más de 7.000 sillas (con opción a tres sillas por demanda) que no han podido cubrir.
Quizás el aumento del precio, seguido de unas mejores instalaciones, hagan desistir a las personas que renuevan los abonos con la intención de revenderlos (aumentar el precio aún más en la reventa dejaría de ser rentable si no consigues venderlas) y deje de ser atractivo para aquellas que solo compran el abono para sentarse el Jueves Santo. Esos inconvenientes quizás permitiera la liberación de cientos de abonos que podrían adquirirlos aquellos que llevan años reclamándolos.
¿Horarios?, ¿Tiempos de paso?, ¿Precio de los abonos?, ¿Perpetuidad?, etc... que cada uno defienda su postura, a ser posible con argumentos.
Por mi parte, considero que el coste medio de los abonos es bajo. Un espectáculo del Circo del Sol (por poner un ejemplo que acabo de consultar) dura unas 2 horas y el precio medio por asiento está en 50-60€. La Semana Santa de Málaga ofrece una experiencia (artística y musical) de 6 horas diarias durante 6 días y el precio medio está en torno a los 70€ por localidad.
Quizás de esta manera, al abonado que realiza el pago, le "dolería" más quedarse en su casa y no disfrutar del "espectáculo". Aun así, esto tiene muchos matices, ya que para algunas personas 70€ es un dineral y para otras no tanto.
En contrapartida el Recorrido Oficial debería ofrecer la suficiente comodidad y servicios equivalentes al coste. No es normal que en los tiempos que corren la gente tenga que soportar 6 horas sentadas en una silla incómoda y con estrecheces en las 4 direcciones, con dificultades en los accesos y sin un mínimo de información sobre lo que va a presenciar (historia, titulares, horarios, bandas, etc.), entre otros aspectos mejorables.
Esta incomodidad también lo considero fundamental a la hora de decidirse a ocupar el asiento de primera a última hora.
Como siempre es bueno comparar otras realidades, en el resto de las capitales de provincia andaluzas el precio es inferior, excepto en Sevilla, donde a pesar de contar con 12.000 asientos más que en Málaga, y el precio medio ser un 70% superior, han tenido este 2017 una demanda de más de 7.000 sillas (con opción a tres sillas por demanda) que no han podido cubrir.
Quizás el aumento del precio, seguido de unas mejores instalaciones, hagan desistir a las personas que renuevan los abonos con la intención de revenderlos (aumentar el precio aún más en la reventa dejaría de ser rentable si no consigues venderlas) y deje de ser atractivo para aquellas que solo compran el abono para sentarse el Jueves Santo. Esos inconvenientes quizás permitiera la liberación de cientos de abonos que podrían adquirirlos aquellos que llevan años reclamándolos.